Por Francisco Carabantes
Las emociones positivas hacen referencia a estados emocionales agradables y placenteros que son beneficiosos tanto para el bienestar físico como mental. Además, promueven el desarrollo de relaciones interpersonales sanas y armónicas.
El estudio de las emociones positivas ha sido limitado en relación a las emociones negativas, emociones que han generado un mayor interés y en las que los investigadores han puesto mayor énfasis. Sin embargo, en los últimos años ha habido un creciente interés en las emociones positivas, y existen suficientes perspectivas teóricas que aportan un mayor entendimiento sobre qué son las emociones positivas y cómo impactan en la vida de las personas.
Qué son las emociones positivas
La definición o el significado de las emociones tiende a variar, según la teoría psicológica que se utilice. En general, podemos decir que las emociones son una reacción o respuesta fisiológica (del organismo) ante un estímulo interno o externo, y que cambia o altera el estado interior de una persona.
Las emociones positivas son una reacción del organismo ante un estímulo interno o externo, pero que cambia el estado interior de un individuo de manera positiva. Es decir, una emoción positiva es una respuesta agradable, placentera o deseable ante un determinado estímulo, la cual afecta a la persona de forma benéfica.
Es por esto que a las emociones positivas se las suele denominar también como emociones saludables, por el impacto benéfico que tienen no solo en la salud de una persona, sino también en su interacción con el entorno.
Por lo tanto, las emociones positivas se definen de tal manera porque influyen positivamente en las personas, tanto psicológica (estado interior) como socialmente (interacción con el entorno). No son positivas porque sean emociones “buenas”, sino porque son placenteras e influyen benéficamente en el organismo, en el comportamiento y en el desarrollo personal de un individuo.
La importancia y los beneficios de las emociones positivas
En un sentido general, podemos decir que las emociones positivas tienen una doble importancia: fomentan el bienestar y un crecimiento psicológico personal y duradero. Esto significa que, estas influyen de manera benéfica en la salud y fomentan una “resiliencia psicológica”, la cual aporta un sentido y significado positivo ante circunstancias cambiantes y adversas.
Estos son algunos de los beneficios de las emociones positivas:
- Resiliencia: Las emociones positivas fortalecen la capacidad de enfrentar desafíos y superar adversidades.
- Salud mental: Fomentan la salud mental al promover patrones de pensamiento positivos, creativos, inclusivos y flexibles.
- Razonamiento eficiente: Contribuyen a un razonamiento eficaz y creativo, clave para el aprendizaje y la resolución de problemas.
- Bienestar subjetivo: Mejoran la percepción de satisfacción general con la vida y el equilibrio entre afectos positivos y negativos.
- Fortaleza psicológica: Ayudan a gestionar situaciones cambiantes y adversas, dotando a las personas de un sentido optimista en momentos difíciles.
- Salud física: Se ha observado que las emociones positivas tienen efectos benéficos en la salud cardiovascular y el sistema inmunológico.
- Relaciones sociales: Fomentan la conexión con los demás al promover actitudes inclusivas, altruistas y de bondad.
- Crecimiento personal: Cultivar emociones positivas impulsa el desarrollo personal y la búsqueda de metas de vida.
- Satisfacción y compromiso: Contribuyen a un sentido general de satisfacción y de compromiso con las actividades de la vida cotidiana.
Las emociones positivas desempeñan un papel fundamental en la psicología humana, influyendo en la salud física y mental, las relaciones interpersonales y el crecimiento individual.
Según los estudios realizados en la teoría de ampliación y construcción, estas investigaciones demuestran que las emociones positivas generan patrones de pensamiento creativos, flexibles y novedosos, al igual que amplían el repertorio de pensamientos y acciones de una persona.
Esta teoría nos indica que, las emociones positivas son importantes y beneficiosas porque permiten construir y reforzar los recursos que posee una persona, a nivel físico, intelectual y social, lo cual genera una espiral ascendente que transforma al individuo. Es decir, la positividad genera a su vez más positividad y éxito en la vida de la persona.
¿Cuáles son las emociones positivas? (Ejemplos)
En términos generales, las emociones positivas son aquellas que se relacionan con sensaciones agradables, placenteras y beneficiosas. Según distintos autores como, Fredrickson, Seligman, Diener, Smith, entre otros, hacen referencia a que las emociones positivas más comunes son aquellos estados de alegría, satisfacción, placer, felicidad, amor y humor.
Veamos a continuación cuáles son las emociones positivas con una lista de ejemplos.
Este es un listado de algunas de las principales emociones positivas:
- Alegría.
- El amor.
- Satisfacción.
- Gratitud.
- La serenidad.
- Placer.
- Bienestar.
- Fluidez.
- Elevación.
- Tranquilidad.
- Resiliencia.
- Entusiasmo.
- Optimismo.
- Humor.
Algunas de las emociones positivas más representativas dentro de la rama de la psicología positiva son:
Bienestar
El bienestar se refiere a una condición en la que una persona experimenta satisfacción, felicidad y una sensación general positiva en diferentes aspectos de su vida. En este sentido, el bienestar se considera un juicio cognitivo global que resulta de la combinación de varios factores, incluida la satisfacción con la vida y el equilibrio entre el afecto positivo y negativo experimentado por la persona.
Este es uno de los estados que ayudan a lograr un buen funcionamiento de la persona dentro de su contexto social, familiar, laboral y personal. En esencia, el bienestar engloba una sensación de armonía, felicidad y satisfacción del individuo con su vida.
Elevación
La elevación es una emoción positiva que se experimenta como una fuerte sensación de afecto. Y esta suele surgir ante situaciones o acciones que reflejan lo mejor de la naturaleza humana, las cuales generan en otros el deseo de ser mejores personas. Esta emoción fomenta la voluntad de ayudar a otros y tiene beneficios psicológicos y sociales, ya que quienes realizan estas acciones se sienten orgullosos y quienes son ayudados experimentan gratitud. En esencia, la elevación impulsa un ciclo de actos positivos que ayuda a mejorar la calidad de vida de las personas.
Fluidez
La emoción de la fluidez es la sensación de estar completamente involucrado en una actividad, concentrando todos los sentidos en dicha actividad al punto en que se suele perder la noción del tiempo. Es un estado en el que las habilidades de una persona están en equilibrio y funcionan óptimamente. Esta es una sensación subjetiva y se puede manifestar en diversas actividades (bailar, cantar, pintar, etc.), convirtiendo lo rutinario en experiencias gratificantes y valiosas para la vida de un individuo.
Resiliencia
La resiliencia se refiere a la capacidad que tiene el ser humano para actuar y recuperarse después de vivir acontecimientos estresantes. También se describe como la capacidad del individuo para afrontar las adversidades de la vida, superarlas y ser transformado positivamente por ellas.
La resiliencia no es un atributo fijo de la personalidad, sino un proceso interactivo entre factores de desarrollo y el entorno familiar, social y ambiental. Su papel radica en desarrollar la capacidad del ser humano para afrontar, sobreponerse, salir fortalecido e incluso transformado por la adversidad.
Humor
El humor se refiere a la capacidad de experimentar o estimular la risa, y también permite interpretar de manera positiva situaciones que podrían ser amenazantes. El humor se puede definir de varias maneras según la perspectiva utilizada. Por ejemplo, en términos de estado de ánimo, podría ser considerado como un sentimiento de bienestar o una fortaleza personal. Además, reírse está relacionado con beneficios para los sistemas muscular y cardiovascular, así como también es benéfico para las relaciones interpersonales.
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